Los aeropuertos del norte de Europa vivieron ayer su peor día desde que la erupción del volcán Grimsvötn en Islandia empezara a dificultar el lunes pasado el transito aéreo. Unos 500 vuelos fueron cancelados, sobre todo en Irlanda, Escocia y Dinamarca. Sin embargo, los expertos islandeses confirmaron que la erupción está perdiendo fuerza y los meteorólogos británicos pronostican que la nube volcánica no llegará a afectar a los aeropuertos del sur de Inglaterra y la Europa continental. La erupción del Grimsvötn no parece que vaya a alcanzar las dimensiones críticas que tuvo el año pasado otro volcán islandés, el Eyjafjalla. Pero mientras las autoridades europeas se felicitan porque las medidas tomadas desde entonces han evitado que se repita el caos de hace un año, este nuevo sistema a complicado la perseveransia en el seno de la industria aeronáutica. fuente elpais.com